Si bien un buen consultor/mentor puede traer a la mesa excelentes ideas y a partir de allí crear un excelente plan o una muy buena estrategia, si no se involucra a los empleados o si estos no compran la idea, está estará condenada al fracaso, tal como lo dice Carlos Ghosn CEO de Nissan-Renault:
“Five percent of the challenge is the strategy. Ninety-five percent is the execution.”
La forma más clara de encontrar soluciones y el compromiso para ejecutarlas viene de buscarlas al interior, es allí donde esta la pasión que se requiere para hacerlas una realidad.
Evite consultores/mentores con actitud de mesías, donde su metodología es infalible y es la única que se necesita para encontrar la estrategia. Mejor invite a trabajar a los que escuchan más, la clave esta en los que saben escuchar, porque son estos los que van a entrevistar a tantas personas como sea posible, en la áreas criticas de la organización, a los encargados del proceso o los que están cerca del proceso y siempre preguntarán:
¿Qué esta mal?
¿Qué cree que esta mal?
¿Cómo puede usted arreglarlo?
Cuando se entrevista a suficientes personas, siempre nace un plan a ejecutar con la pasión para hacerlo realidad.
No olvidemos que a la gente no le gustan los cambios, y muchos planes estratégicos implican dar vueltas, giros o pivotear, y a no ser de que el compromiso exista, estos difícilmente encuentran el espacio para ejecutarse, sin embargo, cuando la gente ve sus ideas reflejadas en lo que la compañía o startup quieren hacer, se toman el liderazgo y se hacen cargo de lo que es necesario de ejecutar.
En sí, es posible que el plan externo sea mejor, pero cuando lo comparamos contra la ejecución, el plan interno siempre tiene un compromiso más alto, por ende una posibilidad de ejecutarse mayor. Es así, que un buen consultor/mentor es un habilitador de lo que hoy hay, como lo decía Pablo Sprenger, CEO de SURA México sobre los resultados de una sesión de trabajo de consultoría:
“Esto se ve muy sencillo, no hay nada que no supiéramos, pero el valor no esta en decir o traer a la mesa lo que no se ha visto en la compañía, el valor esta en traer el compromiso de muchas áreas a trabajar en lo que sabíamos que había que trabajar.”
Más ejecución, menos formatos y talleres.