Lunes 4 de septiembre de 2006, 2:51 am.

Photo: unsplash White.Rainforest

Abro los ojos, miro al reloj en la mesa de noche, 2:51. Doy una vuelta entera por el cuarto, miro las sombras que se van formando, vuelvo a mirar a la mesa de noche, 2:51. No pasa el tiempo, me digo a mí mismo.

Contemos sombras, 1, 2, 3, … 15, 16, 17… no, esto no fue por este lado, mesa de noche, 2:52. No pasa el tiempo.

¿Y si me levanto?

Dicen que al que madruga dios le ayuda, pero ¿será qué si hay un dios? Y en qué me podría ayudar, mesa de noche: 2:52, no pasa el tiempo.

Hace unos años contraje el mal de dormir poco, sé que me he ido enloqueciendo lentamente, sobre todo cuando las noches son tan silenciosas como esta. Mesa de noche, 2:53. No pasa el tiempo.

Aprendi para la universidad a recuperarme rápidamente después de dormir si acaso 4 horas, ahora sufro porque si me acuesto a las 10 de la noche, a las 2 de la mañana ya estoy con el ojo listo para iniciar el día, y eso que el sol a esta hora ni a pensado en iniciar su recorrido. Mesa de noche: 2:54, No pasa el tiempo.

Aún no he tomado la decisión de iniciar con las pastillas para dormir, porque encontré que ver una película repetida en la noche tiene una gran dosis de somníferos y me ayuda a volver a dormir en noches como esta. Mesa de noche, 2:53. No pasa el tiempo.

¿Qué? No, espera… mesa de noche, 2:57. Por un segundo pensé que había regresado en el tiempo. Pero debo haber cabeceado un poco, pasaron tres minutos rápidamente, ¿será que esta pasando más rápido?

Busco el control del televisor, creo que tengo puesto un DVD con Good Will Hunting, si no caigo dormido, al menos me distraigo un rato. Pero el control no aparece, decido hacer la abdominal para ver si lo deje al lado del televisor, la hago con tal facilidad que me sorprendo, ¿estaré ya tan despierto? Mesa de noche, 2:59, No pasa el tiempo, pero al menos no estoy tan ansioso (creo).

En la cama hay una sombra distinta, parece como si las cobijas formaran un cuerpo, me quedo observando la forma y si parece que alguien duerme en mi cama. ¿Pero yo anoche no dormí con nadie? Me acerco, la poca luz que entra no me deja descubrir si solo son las cobijas o si si hay alguien más, así que extiendo mi mano, y me decido a agitar un poco aquel cuerpo.

Me despierto agitado, es como si alguien me hubiera movido fuertemente, miro la mesa de noche, 3:00am.

– Rayos me he vuelto a despertar temprano, hoy será un día largo.